viernes, 15 de febrero de 2013

UNA ORACION

Bienaventurados los que no creen en el Señor
porque ellos no heredarán el reino de los cielos
y así no tendrán que luchar en este mundo,
por un pedacito de cielo que ellos mismos
se empeñaron en destruir.

Bienaventurados los que sueñan cuando están
despiertos porque ellos despiertan
cuando están soñando y si la vida se vuelve
pesadilla siempre les queda el consuelo de dormir
al despertar; de vivir al soñar y de soñar al morir
y así se irán muriendo y despertando.

Bienaventurados los locos, los perdidos
los de los ojos inquietos , los que gritan en silencio
secuestrando el aire.
los que acuñan pesadillas cada noche
los que lloran riendo y vuelan como pájaros
cuando caminan sobre la nube de asfalto
y de cenizas de restos de edificios derrumbados
a golpe de suspiros.


Bienaventurados los que fracasan una y mil veces
porque una y mil veces se tendrán que volver a levantar...
....(continuará )...

Ulises  Figueroa  Hernández